Saltillo fue fundada, según el documento más certero que se tiene y el que hasta ahora se ha tomado como oficial, en 1577.
Ese mismo año, Alberto del Canto, uno de los hombres al que se le atribuye la fundación de la actual capital coahuilense, también intentó fundar Monterrey. Pero eso último no le salió del todo bien.
Esta es una narración sobre conquistadores, tierras de nadie y acontecimientos que hasta hoy son centro de debate entre historiadores.
Siendo el verano del 2023, seguimos sin localizar el acta oficial de la fundación de la Villa de Santiago del Saltillo. Con ello, dudas siguen sin ser aclaradas.
Por muchos años se pensó que la fecha correcta era 1575. Así lo había dejado por escrito en un libro de memorias el padre Pedro Fuentes, párroco de la Villa en 1745.
Esto cambió apenas el siglo pasado, cuando se encontró un manuscrito en el Archivo de Parral, Chihuahua, que modificaría las celebraciones saltillenses.
El “nuevo” documento hacía referencia al dato de que la fundación de Saltillo ocurrió en 1577. Dos años más tarde de lo que se pensaba.
La información fue aceptada como oficial y apropiada por el entonces gobernador de Coahuila, Óscar Flores Tapia (1975-1981), quien optó por celebrar el 400 aniversario de la ciudad cuando transcurría 1977.
Pero mientras es un año u otro, lo cierto es que el portugués Alberto del Canto es históricamente reconocido como el fundador de la Villa de Santiago del Saltillo, junto con otros 18 extranjeros. Entre ellos Juan Navarro y Santos Rojo.
MÁS TERRITORIO
Luego de haber establecido el campamento que dio inicio a Saltillo, Alberto del Canto se desplazó hacia la actual zona de Monterrey.
Ahí instaló dos asentamientos en las tierras que él mismo bautizó como Santa Lucía. No obstante, sus intenciones no progresaron y los campamentos se disolvieron.
Sin embargo, esto sería el comienzo de las tres fundaciones que guarda el pasado de “La Sultana del Norte”.
Cinco años después, en 1582, el español Luis Carvajal y de la Cueva se encontró con este territorio desolado mientras buscaba establecer un camino que conectara a Tampico con Zacatecas.
Carvajal vio potencial en el valle abastecido de arroyos y fundó el que llamó Nuevo Reino de León, gracias a una capitulación celebrada con el rey de España, Felipe II.
Pero cuando se creía que esta vez sería el establecimiento oficial, Carvajal fue perseguido y encarcelado, lo que provocó que el asentamiento, aún sin sólidez, quedara nuevamente libre.
UN ‘SALTILLENSE’ OPORTUNISTA
En este punto de la historia entra Diego de Montemayor. Aunque nacido en España, como muchos otros extranjeros se convirtió en saltillense por conquista y residencia.
El explorador convocó a 12 familias, todas habitantes de la Villa de Santiago del Saltillo, a moverse a un nuevo territorio.
Siendo el 20 de septiembre de 1596, 19 años después que Alberto del Canto, Montemayor y su grupo de seguidores se instalaron para fundar la Ciudad Metropolitana de Monterrey.