Ciudad de México – Ni las reformas legislativas en el Congreso ni las políticas públicas del gobierno federal han logrado frenar el preocupante consumo de productos nocivos para la salud en México, según el último informe entregado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) a la Cámara de Diputados.

Durante el primer semestre de 2023, la recaudación por concepto del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) relacionado con estos productos continuó creciendo de manera constante. Según los datos proporcionados, se recaudaron 97 mil 273.3 millones de pesos en el período de enero a junio de 2023, lo que representa un aumento de más de 10 mil millones de pesos en comparación con el mismo período de 2022 y casi 22 mil millones de pesos más que en 2021.

Entre los productos que más destacaron en este aumento de recaudación se encuentran las bebidas alcohólicas, especialmente vinos, licores y cerveza, que experimentaron un incremento de 9 mil 174 millones de pesos en comparación con 2021. Le siguieron en la lista la comida chatarra, con un aumento de 5 mil 124 millones, y el tabaco, con un aumento de 3 mil 778 millones de pesos. Además, las bebidas energéticas y saborizadas también contribuyeron significativamente con un incremento de 3 mil 317 millones de pesos.

Es importante señalar que a pesar de los esfuerzos legislativos por combatir el consumo de tabaco, incluyendo la prohibición de fumar en espacios al aire libre como terrazas, la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados obtuvo una suspensión definitiva contra el decreto que reforma el reglamento de la Ley General para el Control del Tabaco.

En el caso de la comida chatarra, que es una de las principales causas de sobrepeso y obesidad en México, la recaudación continuó en aumento, pasando de 12 mil 381.3 millones de pesos en el primer semestre de 2021 a 14 mil 767.8 millones en el mismo período de 2022. Para el primer semestre de 2023, Hacienda recaudó 17 mil 505.5 millones de pesos por este concepto.

Estos datos reflejan un desafío persistente en la lucha contra el consumo de productos nocivos para la salud en México y subrayan la necesidad de seguir implementando medidas efectivas para reducir su consumo y promover hábitos de vida más saludables en la población.