Nueva York, Estados Unidos – Las esperanzas y expectativas para la temporada debut de Aaron Rodgers con los New York Jets se han desmoronado con la confirmación de una lesión en el tendón de Aquiles. Una resonancia magnética realizada hoy por la mañana ha revelado la devastadora noticia de que el experimentado quarterback se ha roto el tendón de Aquiles en los primeros minutos de su debut en casa contra los Buffalo Bills, en un emocionante partido del Monday Night Football.
El debut de Rodgers con los Jets había generado una gran anticipación en la NFL, ya que el cuatro veces MVP de la liga llegó en abril a Nueva York con la promesa de revitalizar a un equipo que no ha ganado un título en más de medio siglo. Sin embargo, su temporada se ha visto truncada por esta lesión que amenaza su carrera deportiva.
La lesión de Rodgers ocurrió en el cuarto movimiento del partido, que apenas tenía cuatro minutos de juego. Fue derribado por el defensivo de los Bills, Leonard Floyd, en una jugada que no parecía particularmente impactante. Tras cojear al levantarse, Rodgers hizo un gesto indicando que no podía continuar y fue escoltado por los médicos fuera del campo.
El entrenador de los Jets, Robert Saleh, expresó su preocupación por la lesión de Rodgers y dijo a los periodistas: «Estamos preocupados por su tendón de Aquiles… La resonancia probablemente confirmará lo que pensamos que sucedió, pero no es bueno».
Esta lesión no solo representa un duro golpe para Rodgers y su prometedora temporada con los Jets, sino que también plantea interrogantes sobre el futuro de la franquicia neoyorquina en esta temporada. Zach Wilson, un joven lanzador de 24 años, tuvo que asumir la responsabilidad tras la salida de Rodgers. A pesar de un comienzo incierto, los Jets lograron remontar para vencer a los Buffalo Bills en tiempo extra, con un marcador final de 16-22.
La noticia de la lesión de Rodgers ha recordado a los aficionados de los Jets el drama vivido en septiembre de 1999 cuando el quarterback Vinny Testaverde también se rompió el tendón de Aquiles en el primer partido de la temporada, un fatídico lunes. Las lesiones en el tendón de Aquiles, además de ser dolorosas, requieren un largo proceso de recuperación, lo que significa que Rodgers estará fuera de acción por un tiempo considerable.
La preocupación ahora se centra en el futuro de Aaron Rodgers y en la búsqueda de un reemplazo adecuado para liderar a los Jets mientras se recupera. La temporada de la NFL continúa y, con ella, la incertidumbre sobre el destino de este equipo de Nueva York.