Libia– La comunidad internacional ha acelerado los esfuerzos para brindar asistencia a Libia después de unas inundaciones catastróficas, con un número de muertos que se acerca a los 4,000 y miles de personas desaparecidas. Las inundaciones fueron desencadenadas por una tormenta denominada Daniel y se han comparado con un tsunami, afectando particularmente a la ciudad costera mediterránea de Derna.

La tormenta causó la rotura de dos represas en el río Wadi Derna, lo que resultó en riadas de agua y lodo que arrasaron edificios, vehículos y cobraron la vida de numerosas personas. Además, varios individuos fueron arrastrados hacia el mar, y cuerpos sin vida comenzaron a emerger en el Mediterráneo, cuyas aguas se volvieron marrones debido al lodo.

La Organización Meteorológica Mundial (OMM) de la ONU ha declarado que la mayoría de las víctimas «podrían haberse evitado» si los sistemas de alerta temprana y la gestión de emergencias hubieran funcionado correctamente.

Petteri Taalas, jefe de la OMM, señaló que la falta de pronósticos meteorológicos precisos y la falta de acción basada en las alertas tempranas contribuyeron significativamente al alcance de la tragedia. Además, destacó que el conflicto interno que afecta al país durante años ha dañado gravemente la red de observación meteorológica.

Ante esta tragedia, la comunidad internacional está movilizando ayuda hacia Libia. Aviones y barcos militares de países de Medio Oriente y Europa están entregando asistencia de emergencia al país, que ya ha estado marcado por la guerra y la inestabilidad.

La ONU ha prometido $10 millones para apoyar a los sobrevivientes en Libia, incluyendo a alrededor de 30,000 personas que se quedaron sin hogar en Derna, lo que representa casi un tercio de la población de la ciudad antes del desastre.

Sin embargo, la situación de ayuda se ve obstaculizada por la destrucción de carreteras e inundaciones que dificultan el acceso humanitario. Los puentes sobre el río Derna, que conectan diferentes partes de la ciudad, también se han derrumbado.

Hasta el miércoles, las autoridades del este de Libia habían registrado 3,840 muertes en la ciudad de Derna, con 3,190 ya enterrados. Entre las víctimas, se encuentran al menos 400 extranjeros, principalmente sudaneses y egipcios. Además, más de 2,400 personas aún están desaparecidas según las autoridades.

La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR) advierte que podría haber hasta 10,000 personas desaparecidas. También se ha alertado sobre el riesgo relacionado con las minas antipersona que las inundaciones han arrastrado a otras áreas.

La tormenta Daniel golpeó la costa oriental de Libia el domingo, afectando a varias ciudades, pero causando un impacto particularmente devastador en Derna. Las Naciones Unidas, Estados Unidos, la Unión Europea y países de Medio Oriente y el Norte de África están cooperando en los esfuerzos de ayuda y asistencia humanitaria.