El abigeato, un delito que involucra el robo de ganado, está experimentando un aumento alarmante en el estado de Coahuila, México, desde la eliminación de los filtros fitosanitarios operados previamente por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sagarpa). Estos filtros, ubicados en los límites de las fronteras estatales, cumplían un papel crucial en la supervisión y control del movimiento del ganado vacuno, bovino, equino y otras especies en el país.

José Luis López Cepeda, líder de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA) en Coahuila, ha destacado que la eliminación de estos puntos de inspección ha creado un ambiente propicio para el aumento del abigeato. Sin la presencia de estos filtros, los delincuentes pueden llevar a cabo sus actividades ilícitas sin temor a ser detenidos y en cualquier momento del día.

«Hemos recibido informes sobre un aumento significativo en el robo de ganado en muchas fincas y comunidades rurales en la Región Sureste de Coahuila. Es probable que aquellos que cometen estos actos trasladen el ganado a otras entidades para venderlo y modificar su origen sin temor a ser perseguidos por esta actividad ilegal», señaló López Cepeda.

El líder de la UNTA también ha advertido sobre el aumento del riesgo de enfermedades fitosanitarias, como la brucelosis, debido al traslado de animales entre regiones sin una supervisión adecuada. Esta situación plantea preocupaciones tanto para la sanidad animal como para la seguridad alimentaria, ya que estas enfermedades pueden transmitirse a los humanos.

«Es evidente que bajo esta administración federal, las inspecciones de ganado y las revisiones en los puntos de control en carreteras ya no existen. Sin autoridades que supervisen, las personas pueden trasladar ganado de una entidad a otra, ya sea legal o robado, poniendo en riesgo la salud de los animales y la posible contaminación de los productos por enfermedades de este tipo», enfatizó López Cepeda.

Por último, el líder de la UNTA en Coahuila señaló que el estado ha experimentado un aumento en el robo de animales durante varios años, especialmente en municipios como General Cepeda, Saltillo y Parras de la Fuente. La falta de medidas de control y supervisión adecuadas ha contribuido significativamente a este preocupante problema en la región.

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