Nueva York – El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, condenó enérgicamente la práctica bélica de Rusia de secuestrar a niños ucranianos y llevarlos por la fuerza a Rusia durante su discurso ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Zelensky calificó esta acción como un «genocidio».

En su intervención, Zelensky declaró: «Conocemos los nombres de decenas de millas de niños y tenemos pruebas sobre otros cientos de millas secuestrados por Rusia en los territorios ocupados de Ucrania y posteriormente deportados».

La Corte Penal Internacional (CPI) emitió en marzo una orden de detención contra el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y la funcionaria rusa Maria Lvova-Belova por su presunta implicación en un plan para deportar a niños ucranianos a Rusia.

Zelensky expresó su profunda preocupación por el destino de estos niños y el impacto que esta práctica tiene en su vida y sus vínculos familiares. Señaló que en Rusia, a estos niños se les inculca el odio hacia Ucrania y se rompen todos los lazos con sus familias, lo que considera claramente un acto de genocidio.

El presidente ucraniano también abordó la guerra en Ucrania, destacando que es solo la última de una serie de conflictos en los que Rusia ha estado involucrada. Mencionó las ocupaciones de partes de Moldavia y Georgia por Rusia, así como el papel de Rusia en la destrucción de Siria.

Zelensky advirtió sobre los objetivos de Rusia en la actual guerra en Ucrania, afirmando que busca convertir la tierra, la gente y los recursos de Ucrania en un arma contra el orden internacional basado en normas. Su discurso en la ONU enfatiza la importancia de abordar las violaciones de derechos humanos y los actos de agresión en Ucrania y subraya la urgencia de una respuesta internacional efectiva para proteger a los más vulnerables en medio de este conflicto.

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