Coahuila – Este año, el estado de Coahuila ha registrado un total de nueve casos de dengue, según información proporcionada por la Secretaría de Salud de la entidad. De estos casos, cinco han sido clasificados como Dengue No Grave (DNG), mientras que cuatro se han categorizado como Dengue Grave o Dengue con Signos de Alarma (DG+DCSA).
El dengue es una enfermedad viral transmitida a los seres humanos a través de la picadura de mosquitos hembra infectados, principalmente del género Aedes aegypti. Los síntomas comunes del dengue incluyen fiebre elevada, dolor de cabeza intenso, dolor detrás de los ojos, dolores musculares y articulares, náuseas, vómitos, agrandamiento de ganglios linfáticos y sarpullido. En algunos casos raros, la enfermedad puede agravarse y representar un riesgo para la vida.
Hasta la fecha, no se ha informado de fallecimientos relacionados con el dengue en Coahuila en 2023. Además, la Secretaría de Salud del estado ha descartado 286 casos probables de dengue mediante pruebas realizadas en el Laboratorio Estatal de Salud Pública.
El año anterior, Coahuila concluyó con un total de 572 casos confirmados de dengue, de los cuales, 435 fueron clasificados como DNG y 137 como DG+DCSA. La Comarca Lagunera, que comprende ciudades como Torreón y Gómez Palacio, tuvo solo dos casos notificados en 2022. La mayor incidencia de la enfermedad se registró en Piedras Negras, con 303 casos positivos, seguida de Múzquiz con 186 casos y San Juan de Sabinas con 40 casos. Además, en 2022 se reportaron cuatro fallecimientos relacionados con el dengue en la región.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que las personas que han tenido una infección previa por el virus del dengue tienen un mayor riesgo de desarrollar dengue grave. Además, factores como la urbanización no planificada pueden contribuir a la propagación de la enfermedad, dependiendo de la densidad de población, los desplazamientos de personas y otros factores ambientales y sociales.
Las autoridades de salud en todo el mundo enfatizan la importancia de prevenir la propagación del dengue a través del control de mosquitos vectores y la eliminación de criaderos de mosquitos en áreas residenciales y comunitarias. También se recomienda a las personas tomar medidas de protección personal, como el uso de repelente de insectos y ropa de manga larga, para evitar las picaduras de mosquitos.