La lucha contra el narcotráfico continúa siendo una prioridad para las fuerzas de seguridad en México, y un reciente operativo en la Central de Autobuses de Torreón, Coahuila, ha evidenciado la persistencia de los problemas de drogas como el fentanilo en la región. En esta ocasión, integrantes de la Guardia Nacional (GN) interceptaron una maleta que albergaba aproximadamente 3 mil pastillas de lo que se presume es fentanilo.

El operativo se llevó a cabo con la colaboración de binomios caninos especializados en la detección de sustancias ilegales. Durante inspecciones aleatorias en los compartimientos de equipaje de autobuses estacionados en la central, uno de los canes alertó sobre una maleta en particular.

Los elementos de la GN solicitaron al conductor del autobús que identificara al propietario de la maleta, quien accedió a bajar del vehículo y colaborar en una inspección exhaustiva de su equipaje. Fue durante esta revisión que se descubrieron seis bolsas que contenían aproximadamente 3 mil comprimidos de color azul, con características físicas similares a las del fentanilo.

El pasajero, dueño de la maleta, fue detenido en el lugar y tanto él como la presunta droga fueron puestos a disposición de la Agencia del Ministerio Público en la entidad para dar inicio a las investigaciones pertinentes.

El fentanilo es un opioide sintético extremadamente potente, hasta 50 veces más fuerte que la heroína y 100 veces más fuerte que la morfina. Su presencia en el mercado de las drogas ilícitas representa un riesgo significativo para la salud pública, ya que es un importante factor que contribuye a las sobredosis mortales, especialmente en los Estados Unidos.

El fentanilo fabricado ilegalmente a menudo se encuentra disponible en el mercado negro de las drogas en diversas formas, incluyendo líquido o polvo. Además, suele mezclarse con otras drogas como la heroína, la cocaína y las metanfetaminas, a menudo tomando la forma de pastillas que se asemejan a opioides recetados legítimamente. El consumo de drogas mezcladas con fentanilo es altamente peligroso y potencialmente mortal. Las autoridades continúan trabajando arduamente para combatir su tráfico y distribución en la región.

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