Una dolorosa tragedia ha sacudido la frontera entre Estados Unidos y México, donde un niño de tres años perdió la vida después de que su familia intentara cruzar el Río Grande. La trágica noticia fue confirmada por una portavoz del Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS), quien informó sobre el trágico suceso este jueves.
Según la portavoz, la Unidad Marina Táctica recibió información el miércoles por la tarde sobre un niño que fue arrastrado por la corriente del Río Grande mientras intentaba cruzar el río con su familia al norte de la barrera marina en Eagle Pass, Texas. Los agentes de seguridad lograron localizar al niño de tres años y lo llevaron a la orilla, pero lamentablemente, a pesar de los esfuerzos del personal médico, fue declarado muerto en el hospital al que fue trasladado.
Este trágico incidente se produce en medio de un contexto de creciente preocupación en la frontera entre Estados Unidos y México debido al aumento de la migración. El martes, el alcalde de Eagle Pass, Texas, emitió una declaración de emergencia debido al fuerte incremento de migrantes en la zona, que ha estado siendo utilizada como punto de cruce por aquellos que buscan ingresar a Estados Unidos.
Los datos oficiales muestran un aumento significativo en el número de migrantes interceptados en la frontera en los últimos meses. En julio, la patrulla fronteriza detuvo a 132,652 migrantes, en comparación con los 99,545 de junio. Varios medios de comunicación, citando fuentes gubernamentales anónimas, informan que últimamente están ingresando varios miles de personas a diario.
En respuesta a esta situación, el Departamento de Seguridad Interior (DHS) anunció el miércoles que enviará a 800 efectivos militares en servicio activo adicionales para ayudar con la logística y otras funciones en la frontera. Hasta el momento, el Departamento de Defensa ha proporcionado el apoyo de 2,500 efectivos permanentes de la Guardia Nacional.
El presidente estadounidense, Joe Biden, ha responsabilizado al Congreso por la crisis migratoria, argumentando que no ha logrado ponerse de acuerdo sobre una reforma integral para abordar la situación. Desde el 12 de mayo, Estados Unidos ha implementado nuevas reglas en la frontera que restringen el acceso al asilo y ha expulsado o devuelto a más de 253,000 personas a 152 países, en su mayoría de América Latina, según datos oficiales.