Saltillo – Un recién ingresado a la Universidad Autónoma de Coahuila se ha visto envuelto en un dilema educativo debido a la falta de autenticidad de su certificado de bachillerato. Rodrigo Casas, quien completó sus estudios de bachillerato hace casi diez años, fue aceptado en la universidad, pero se encontró con que su certificado, sellado por la Secretaría de Educación Pública de Coahuila (Sedu), no tenía validez alguna.
La historia de Rodrigo comenzó en 2014 cuando finalizó sus estudios de bachillerato en el Instituto de Enseñanza Olimpia. Luego de una prolongada espera de ocho meses, obtuvo finalmente un certificado sellado por la Sedu que avalaba su nivel académico. Años después, completó su primera carrera en la Universidad del Valle de México sin que se cuestionara la autenticidad de sus niveles académicos anteriores.
Sin embargo, casi diez años después, cuando fue aceptado en la Universidad Autónoma de Coahuila, se le informó que debía verificar la autenticidad de su constancia de bachillerato, un requisito nuevo que no había tenido en cuenta. La universidad cuestionó la validez del certificado, lo que llevó a Rodrigo a investigar en la Sedu, donde no encontraron registros de su certificado.
Rodrigo se encontró en una situación difícil, ya que no podía continuar sus estudios ni obtener respuestas satisfactorias de la Sedu. La funcionaria de la Sedu reconoció que su antigua escuela posiblemente no estaba afiliada adecuadamente al órgano educativo y sugirió que podría tener hasta 100 alumnos inscritos, sin que se realizara alguna auditoría que alertara a los estudiantes sobre la situación.
Daniel Garza, director de Asuntos Académicos de la Universidad Autónoma de Coahuila, señaló que aunque estos casos son aislados, situaciones similares se han encontrado en los primeros ingresos de los alumnos en al menos dos ocasiones cada semestre en los últimos años.
En espera de una resolución, Rodrigo está buscando un amparo que le permita continuar sus estudios mientras la Sedu resuelve su situación. El caso ya ha sido denunciado en la Secretaría de Fiscalización y Rendición de Cuentas para investigar si hubo irregularidades en la función pública relacionadas con el reconocimiento de estos niveles académicos por parte de las escuelas de bachillerato.