República Democrática del Congo.- (RDC) está demostrando que incluso en las circunstancias más desafiantes, es posible avanzar hacia un futuro más sostenible a través de la inversión en energía verde. A pesar de enfrentar barreras financieras significativas y la falta de inversión global en África, Nuru, una empresa con sede en la RDC, está marcando la pausa al apostar por la energía renovable.
El sistema mundial de préstamos, en muchos casos, ha excluido a los países más pobres del mundo, especialmente aquellos en África, al considerarlos demasiado riesgosos para invertir. Esto ha resultado en que tan solo el dos por ciento de la inversión global en energías renovables se haya destinado al continente africano, donde casi mil millones de personas carecen de acceso a la electricidad de manera regular.
Sin embargo, el mundo está experimentando un rápido avance en las inversiones en energías renovables. Este año marcó un hito significativo, ya que por primera vez se invirtió más dinero en energía solar que en petróleo. Nuru, una empresa comprometida con el desarrollo sostenible en la RDC, se ha convertido en un ejemplo a seguir para otros países con menos recursos, al invertir en la energía verde y desafiar las limitaciones financieras.
Los líderes africanos han destacado esta paradoja y argumentan que los proyectos de energía limpia no solo son esenciales para abordar los desafíos climáticos globales, sino que también pueden contribuir a la estabilidad de sus países y economías. La inversión en energía renovable reduce el riesgo percibido por los inversores y, a su vez
Este tema se encuentra en el centro de atención esta semana en una cumbre sobre el clima celebrada en Kenia y será un punto fundamental en las conversaciones sobre el clima promovidas por las Naciones Unidas programadas para finales de este año en Dubái, Emiratos Árabes Unidos.
La inversión en energía verde en África no solo es esencial para mejorar las condiciones de vida de millones de personas que carecen de acceso a la electricidad, sino que también desempeña un papel crucial en el esfuerzo global para combatir el cambio climático y avanzar hacia un futuro. más sostenible. La República Democrática del Congo ha demostrado que, a pesar de los desafíos, es posible liderar en esta área y allanar el camino para un continente más verde y próspero.