direccionBogotá,Colombia- Uno de los principales productores de cocaína en el mundo, ha registrado un preocupante incremento del 13% en las áreas cultivadas con coca durante el año 2022, según un informe publicado este lunes por el Sistema Integrado de Monitoreo de Cultivos Ilícitos (SIMCI) de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC). Este aumento ha elevado la cifra de hectáreas dedicadas al cultivo de coca de 204.000 en 2021 a 230.000 en 2022.
El departamento de Putumayo, ubicado en el sur del país, ha experimentado el mayor incremento en la producción de coca, mientras que el municipio de Tibú en Norte de Santander, en el noreste, ha sido identificado como el epicentro de estos cultivos ilícitos. En la región de Norte de Santander, los investigadores de la UNODC encontraron aproximadamente 28.000 hectáreas de coca en la zona del Catatumbo.
Lo más preocupante es que las áreas con la mayor cantidad de cultivos ilícitos también son aquellas con una presencia significativa de grupos armados ilegales. Regiones como Nariño, Putumayo, Norte de Santander, Cauca y Valle del Cauca son escenarios frecuentes de enfrentamientos entre grupos como las disidencias de las FARC, el ELN (Ejército de Liberación Nacional) y bandas criminales vinculadas al narcotráfico, como el Clan del Golfo.
Según el informe de la UNODC, el 49% de la coca se encuentra en zonas de manejo especial, con un 19% en tierras de comunidades negras, un 15% en reservas forestales, un 10% en resguardos indígenas y un 5% en parques. nacionales naturales.
Además del aumento en la producción de coca, el informe señala una tendencia creciente en la producción de cocaína. La producción potencial de clorhidrato de cocaína alcanzó las 1,738 toneladas, manteniendo la tendencia al incremento que se ha consolidado desde 2013. El informe atribuye estos datos al compromiso de la UNODC y el Gobierno de Colombia para proporcionar información imparcial, objetiva y científicamente fundamentada.
El presidente Gustavo Petro, junto con el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, encabezó la clausura de la Conferencia Latinoamericana y del Caribe sobre drogas el pasado sábado. Ambos mandatarios coincidieron en la necesidad de un nuevo enfoque en la lucha contra las drogas, uno que no se base exclusivamente en la represión y la erradicación forzada de cultivos ilícitos.
“No es repitiendo guerritas y guerras, y tan sanguinarias y feroces y tan equivocadas, como la mal llamada guerra contra las drogas, mirando las drogas como un problema militar y no como un problema de salud de la sociedad”, afirmó Petro.
El Gobierno colombiano ha propuesto una estrategia que implica reducir la campaña de erradicación de coca, sin suspender por completo, y en su lugar promover «consultas voluntarias» con las comunidades para convencerlas de que reemplacen los cultivos ilícitos por cultivos legales a cambio de incentivos económicos. .
El director de la Fundación Seguridad y Democracia, Alfredo Rangel, advirtió que el país está experimentando cifras récord de hectáreas de coca cultivada y producción de cocaína, y destacó el fortalecimiento de grupos violentos ilegales en muchas regiones, mientras que prácticamente se ha detenido la erradicación. forzosa de la coca.
La situación plantea un desafío significativo para Colombia y resalta la necesidad de un enfoque integral y coordinado para abordar el problema de las drogas ilícitas en el país.
