Chiapas, México – La Fiscalía de Chiapas confirmó el hallazgo del cuerpo sin vida de Berni Flor Mejía Velázquez, una maestra de 44 años que había sido secuestrada por un grupo armado el pasado jueves a las 08:40 horas en el plantel del Colegio de Bachilleres de Chiapas (Cobach) número 216, ubicado en la comunidad Río Guerrero, en los límites fronterizos con Guatemala.

Agentes de la Policía de Investigación encontraron el cadáver de la maestra con heridas, aparentemente causadas por arma de fuego. Cerca del cuerpo, a unos 25 centímetros de distancia, se halló un casquillo percutido. Las autoridades procedieron de inmediato al levantamiento del cuerpo para llevar a cabo las diligencias ministeriales pertinentes.

La desaparición de Berni Flor Mejía Velázquez conmocionó a la comunidad, y desde el domingo, pobladores de los municipios de Amatenango de la Frontera, Frontera Comalapa, La Trinitaria, Motozintla y Mazapa de Madero se movilizaron bloqueando carreteras para exigir la aparición con vida de la maestra. La indignación llegó a un punto crítico cuando se incendió un camión en el tramo de la carretera federal 211 que va de Frontera Comalapa a Motozintla, como un acto desesperado para presionar por la liberación de la maestra.

En un gesto desgarrador, el esposo de la maestra, Arsenio Xun Velázquez, de 42 años, se ofreció a entregarse a los captores, dispuesto a que hicieran con él «lo que quisieran», con la esperanza de que liberaran a su esposa.

El hallazgo del cuerpo de Berni Flor Mejía Velázquez sume a su familia en la tristeza y alarma a la comunidad educativa y a la sociedad en general. La maestra deja atrás tres hijas, de 14, 7 y 5 años, quienes han estado desconsoladas desde su desaparición. La hija mayor confesó que soñaba con su madre con frecuencia, añadiendo un dolor aún más profundo a esta tragedia.

El cuerpo de la maestra será velado en el municipio de Mazapa de Madero, su lugar de origen. Sin embargo, la disputa territorial entre los Cárteles Jalisco Nueva Generación y el Cártel de Sinaloa en las regiones Fronteriza y Sierra Madre de Chiapas ha generado preocupaciones de seguridad en torno al evento funerario.

La comunidad exige justicia y el esclarecimiento de este lamentable suceso, mientras las autoridades continúan investigando para identificar a los responsables y llevarlos ante la ley.